Biblioteca del Semiárido de América Latina

La Articulación del Semiárido Brasileño (ASA), la Plataforma del Semiárido y la Universidad Federal de Viçosa (UFV-MG) lanzan una iniciativa inédita y Fundación Plurales es parte activa.

Se presentará este 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente, durante un evento virtual, a las 14 (hora de Brasilia y Argentina), con transmisión en vivo vía Zoom, con traducción simultánea y a través del canal oficial de ASA en YouTube.

La Biblioteca SAL, de acceso gratuito, reúne materiales bibliográficos y multimedia en portugués, español e inglés, resultado de investigaciones científicas, sistematización de experiencias y tecnologías sobre las regiones del Gran Chaco Americano, el Corredor Seco Centroamericano y la Región del Semiárido Brasileño, duramente golpeadas por la crisis climática. Los archivos estarán organizados en ocho colecciones: Acceso a Tierras y Territorios; Agrobiodiversidad; Energía Sostenible; Medio Ambiente; Clima y Cambio Climático; Organización Social y Económica; Políticas, Programas y Proyectos; Sociedad, Educación y Salud.

Verónica Luna, presidenta de Fundación Plurales, miembro de la plataforma Semiáridos, se refiere a la importancia de este tipo de proyectos y evidencia que “promovemos la generación de conocimiento socialmente útil y con otros. Esos otros pueden ser universidades, comunidades, organizaciones, territorios, centros de investigación. Contribuimos a la capitalización de experiencias y fomentamos los procesos de enseñanza, aprendizaje con otros, creando así una comunidad de conocimiento mutuo. Creemos en los conocimientos en y desde los territorios”.

La Plataforma Semiáridos (PSA), es una iniciativa conformada por 13 instituciones representativas de 8 países de América Latina, que tiene como fin relevar y sistematizar las experiencias vinculadas a la utilización y al manejo de los territorios en dichas regiones, para fortalecer la sociedad civil, generar propuestas e incidir en políticas públicas. La Articulación del Semiárido Brasileño (ASA) es una red que defiende, difunde y pone en práctica el proyecto político de convivencia con el Semiárido. Es una red formada por más de tres mil organizaciones de la sociedad civil de diferente índole: sindicatos rurales, asociaciones de agricultores, cooperativas, ONG, etc. Las entidades que la integran están organizadas en foros y redes en los 10 estados que componen la Región Semiárida Brasileña. La Universidad Federal de Viçosa (UFV) es una universidad pública de Brasil, con sede en la ciudad de Viçosa, estado de Minas Gerais. Reconocida por el Ministerio de Educación como la séptima mejor universidad en Brasil.

Durante el evento de lanzamiento, en el que también estarán presentes representantes del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA/ONU) y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina, explicarán cómo la Biblioteca SAL puede apoyar los procesos de enseñanza-aprendizaje a través del acceso al conocimiento y potenciar el intercambio de conocimientos entre instituciones. Así, la plataforma agrega la producción científica de muchos institutos de investigación, universidades y organizaciones civiles, pero que hasta entonces estaba dispersa.

*Foto de portada: Archivo Semiárido

¿Qué nos dejó la COP2 de Escazú?

Fundación Plurales participó de la reunión extraordinaria organizada por la CEPAL, y post encuentro, desarrollamos tres puntos claves que debemos analizar.

El Acuerdo Regional sobre Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe, más conocido como “Acuerdo de Escazú”, es el primer tratado internacional ambiental de la región que aborda obligaciones específicas para proteger a las personas defensoras del medioambiente, por lo que puede permitir la prevención de los conflictos ambientales asociados a la alta tasa de ataques que padecen las personas defensoras de la tierra y el medioambiente en América Latina y el Caribe (ALC).

El acuerdo fue firmado por 24 países y lo ratificaron 15, y entendemos por las declaraciones de la actual ministra de Pueblos Indígenas de Brasil, Sonia Guajajara, que serán los próximos en ratificar.

En ese contexto, entre el 19 y el 21 de abril se realizó la COP 2 de Escazú en Buenos Aires. Esta reunión extraordinaria de la Conferencia de las Partes del Acuerdo, fue acordada en el 2022 por los estados firmantes con la intención de avanzar rápidamente en tres puntos clave del acuerdo: (I) la definición de los miembros Comité de Apoyo a la Aplicación y el Cumplimiento; (II) el mecanismo de financiamiento para poder aplicar el acuerdo a nivel regional; y (III) cómo incluir en los planes nacionales a los y las defensoras ambientales como actores clave del acuerdo.

El encuentro reunió a representantes de los 15 países que ratificaron el Acuerdo, delegados de 8 países en carácter de observadores, representantes de Naciones Unidas, organizaciones sociales y grupos de defensores ambientales.

Declaración de Buenos Aires

Durante la conferencia, se aprobó una declaración política que pone foco en el papel del comité y la necesidad de poner en marcha el mecanismo de financiación.

Si bien carece de contenido técnico/político, se reconoce el gran desafío que supone la integración y puesta en funcionamiento del Comité, mediante modalidades de trabajo creativas y equilibradas que le permitan cumplir los fines que el Acuerdo le atribuye y con la significativa participación del público y de las Partes, según corresponda, con base en un proceso de diálogo abierto, transparente y constructivo, de acuerdo con las reglas de composición y funcionamiento de dicho Comité. También se reitera la necesidad de obtener apoyo adecuado para la implementación del Acuerdo.

¿Qué nos dejó la COP2 de Escazú?

I- Se eligieron a las y los 7 integrantes del Comité de Apoyo a la Aplicación y el Cumplimiento del Acuerdo de Escazú. Este órgano subsidiario de la Conferencia de las Partes del Acuerdo de Escazú para promover la aplicación y apoyar a las Partes en la implementación.

Es un órgano de carácter consultivo, transparente, no contencioso, no judicial y no punitivo. Se rige por sus reglas de composición y funcionamiento, adoptadas en la primera reunión de la Conferencia de las Partes.

Resultaron elegidos para su primera conformación: Guillermo Eduardo Acuña (Chile); Mariana Blengio Valdés (Uruguay); Rita Leonette Joseph-Olivetti (Granada); Patricia Madrigal Cordero (Costa Rica); Andrés Napoli (Argentina); Carole Denise Angela Stephens (Jamaica); y Félix Wing Solís (Panamá).

II- Defensoras de Derechos Humanos en Asuntos Ambientales. Este es, sin dudas, el punto más flojo y cuestionado desde las organizaciones de la sociedad civil, y principalmente, desde las y los defensores ambientales. Durante la conferencia de partes, se registraron numerosos reclamos por la poca oportunidad real de participación y las trabas burocráticas establecidas para poder acreditar como público a la COP2, así como sucedió en Ecuador. Estos pedidos no solo fueron realizados ante los entes anfitriones, sino también ante CEPAL. Si bien el artículo 9 de Escazú es uno de los temas centrales a tratar por la ciudadanía, se evidenció poco espacio para la participación de personas defensoras.

Los side event fueron totalmente virtuales, por lo que funcionaron de forma totalmente “paralela” a la conferencia. En el recinto oficial, en el marco de los “eventos asociados” solo existió un evento que indagó específicamente en la situación de los y las defensoras en América Latina y Caribe, impulsado por Fundación Plurales, Plataforma de defensores y Defensoras Ambientales y la Coalición Nacional por la Tierra de Argentina.

El viernes 21, se presentaron los resultados del Primer Foro Anual de Defensores y Defensoras de Derechos Humanos en Asuntos Ambientales de América Latina y el Caribe, que se realizó en Quito, Ecuador, y se anunció que Panamá será la sede del segundo foro, que se desarrollará en septiembre de 2023.

Sin embargo, los avances para llegar al plan de acción de protección de personas defensoras ambientales sigue siendo lejano para los y las defensoras. Quienes vienen sufriendo criminalización, hostigamiento, violencia y persecución desde hace décadas y que se incrementa en toda la región con el avance indiscutible de las industrias extractivas como solución al déficit de las balanzas comerciales.

III– Avances para la implementación del mecanismo. Argentina, Chile, Ecuador, México, Santa Lucía y Uruguay presentaron acciones para diseñar sus planes nacionales de implementación del Acuerdo. Además, se puso en marcha un Fondo de Contribuciones Voluntarias con el aporte de México (150.000 dólares) y el anuncio de un aporte por parte de Chile, que se suman al realizado por la Argentina con el desarrollo de esta COP2.

Si bien son pasos pequeños, desde la sociedad civil, esperamos que sean la punta de lanza que anime al resto de los Estados a motorizar recursos y acciones específicas para aplicar este tratado único en su tipo.

*Por Nicolás Avellaneda
Facilitador de la Coalición Nacional por la Tierra – ENI Argentina
Director de programas en Fundación Plurales

COP 2: “Es importante participar porque es un espacio directo de incidencia para las organizaciones con quienes trabajamos”

Fundación Plurales estará participando de la Segunda Reunión de la Conferencia de las Partes (COP 2) del Acuerdo Regional sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos Ambientales en América Latina y el Caribe, Acuerdo de Escazú.

Esta reunión extraordinaria será presencial en Buenos Aires, del 19 al 21 de abril. Organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), y está destinada principalmente a la elección de los primeros integrantes del Comité de Apoyo a la Aplicación y el Cumplimiento. La lista de candidatos y candidatas está compuesta por cinco hombres y cinco mujeres, de diez nacionalidades diferentes. Hay tres representantes de Centroamérica y México, tres del Caribe anglófono y cuatro de Sudamérica. Corresponden actualmente a cinco Estados Parte y cinco Estados no Parte.

La sede de este espacio de diálogo entre autoridades de países de la región, representantes de organismos regionales e internacionales y organizaciones de la sociedad civil, será el Hotel Libertador y habrá transmisión en vivo. Dado que el número de solicitudes duplicó el espacio disponible, el registro para el público cerró el 20 de marzo. Los eventos paralelos serán totalmente virtuales.

La conferencia será inaugurada el miércoles 19 de abril, a las 18 (hora de Buenos Aires, Argentina, UTC -3), en el Centro Cultural Kirchner (CCK) por autoridades de la CEPAL, del Gobierno de Argentina y otras altas autoridades y representantes del público. El segundo día, además de la presentación de las candidaturas, se realizará una Sesión Especial titulada Experiencias comparadas de órganos de apoyo a la aplicación y el cumplimiento. También será el Diálogo regional: Fortalecimiento de las capacidades para la implementación nacional.

El 21 de abril habrán dos Sesiones Especiales: sobre el seguimiento a la Decisión I/6 sobre defensoras y defensores de derechos humanos en asuntos ambientales, y seguimiento a la Decisión I/4 vinculada a arreglos financieros e informe del Fondo de Contribuciones Voluntarias. Además, se realizará la elección de los integrantes del Comité de Apoyo a la Aplicación y el Cumplimiento, y se acordarán las decisiones aprobadas de la COP 2. Entre los días 19 y 21 de abril se realizarán diversos eventos paralelos virtuales oficiales.

Nicolás Avellaneda, integrante del Área Democratización de Recursos Naturales y Territorios de Conocimiento de Fundación Plurales, que estará presente en la COP 2, cuenta que participaremos en el marco de la Coalición Nacional por la Tierra (ENI Argentina) y la Plataforma de Defensores y Defensoras de la Tierra y Territorio, en dos espacios de intercambio y discusión. Por un lado, un evento PRE COP, donde distintas organizaciones sociales se reunirán para generar discusiones y aportes sobre defensores y defensoras en América Latina. Por el otro, un Evento Asociado, donde se presentarán los resultados de los informes nacionales sobre situación de defensores en Argentina, Guatemala, Colombia y Perú.

Programa completo aquí

El acuerdo

El Acuerdo de Escazú reglamenta el acceso a la información por parte de las poblaciones, la información pública ambiental, la protección de defensores y defensoras ambientales, acceso efectivo a la justicia -que se cumpla un fallo, por ejemplo- y también, que la participación de la ciudadanía sea activa y respetada.

Fue adoptado en Escazú, Costa Rica, el 4 de marzo de 2018 y entró en vigor el 22 de abril de 2021. Hasta el momento, 24 países de América Latina y el Caribe firmaron y cuenta con 15 Estados Partes. Estos últimos son: Antigua y Barbuda, Argentina, Belice, Bolivia, Chile, Ecuador, Granada, Guyana, México, Nicaragua, Panamá, San Vicente y las Granadinas, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía y Uruguay.

Este acuerdo es el primer instrumento normativo a nivel internacional que garantiza y establece un sistema de protección para los y las defensoras del medio ambiente. Plantea normativas en un aspecto más técnico y propone una serie de derechos en materia ambiental, enfocados principalmente en el acceso a la información, el derecho a la participación y la justicia. Este pacto representa un hito para la responsabilidad de las empresas con el medioambiente.

Implementar de manera efectiva el Acuerdo de Escazú significa un gran paso hacia la consolidación de un nuevo modelo de democracia ambiental, fortalecimiento de los derechos de las personas a vivir en un ambiente sano y ser parte del desarrollo sostenible, inclusivo y justo. Un buen punto de partida.

“Para Plurales es importante participar de las COP de Escazú porque es un espacio directo de incidencia para las organizaciones de defensoras ambientales con quienes trabajamos. El acuerdo implica nuevos mecanismos de protección, seguridad y garantías de derechos necesarios para que podamos ejercer nuestro accionar. Por supuesto, el Acuerdo de Escazú por sí solo no basta, y es por esto que también cobra importancia nuestra participación activa en estos espacios, ya que generan un momento crucial para poder generar lazos y sinergias con organizaciones socias y aliadas”, explica Nicolás.

Nuestro evento PRE COP

Fundación Plurales, junto a Proetica, Programa de Gobernanza Ambiental, Oxfam, Plataforma de Defensores y Defensoras de la Tierra y Territorio frente al Extractivismo, la Coalición Nacional por la Tierra Argentina, la International Land Coalition (ILC), Earthrights International y Fundación Ecuménica para el Desarrollo y la Paz (Fedepaz), organizan “El Acuerdo de Escazú y las Personas Defensoras del Ambiente y del Territorio”. Una jornada previa con organizaciones indígenas y sociedad civil para difundir e incidir sobre la situación y demandas de las y los defensores ambientales.

Será el martes 18 de abril, en el Hotel Conquistador (Suipacha, 948, Buenos Aires). Requiere inscripción previa y tendrá transmisión en redes sociales. Durante ese día se trabajará sobre políticas públicas de protección de defensoras y defensores ambientales, la situación en Perú, Escazú como herramienta de protección efectiva para personas defensoras del ambiente y el territorio, demandas y propuestas de mujeres defensoras de América Latina y el Caribe.

En el cierre, se estrenará “La Ilusión de la Abundancia” de Erika González Ramírez y Matthieu Lietaert. Este documental, coproducido entre varias organizaciones, presenta a Berta Cáceres, Carolina de Mouro y Máxima Acuña, tres mujeres defensoras de derechos humanos de América Latina, que en la primera línea, defienden a sus comunidades del extractivismo de corporaciones multinacionales -los modernos conquistadores- que reducen sistemáticamente sus tierras, recursos naturales y medios de vida.

Por qué organizar un evento PRE COP: “Fue muy difícil en la COP, y de hecho está muy cuestionado por las organizaciones de la sociedad civil la poca participación que tienen. Hay un espacio para eventos paralelos, que solo son virtuales y están siendo todavía seleccionados por CEPAL. Se introdujo una categoría nueva que son los Eventos Asociados, que los coordina la Secretaría de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente de la Nación argentina, institución anfitriona de la COP. Estos Eventos Asociados son pocos y los únicos en donde participa sociedad civil y Naciones Unidas”.

Nicolás detalla que “logramos incorporar un Evento Asociado, pero como era muy difícil generar espacios de encuentro y diálogo, y había una alta demanda de las organizaciones sociales para contar las distintas experiencias y proyectos que estaban desarrollando, nos asociamos para armar este evento. Una jornada completa, desde las 9 de la mañana hasta las 9 de la noche, donde habrá actividades de distintas organizaciones para el análisis y diálogo, desmenuzar algunos mensajes o acuerdos claves que después, los que tienen acreditación formal para el evento del 19, 20 y 21, puedan llevarlos. Así podemos tener una voz más organizada y que haya reflexionado sobre los distintos saberes y pareceres de las organizaciones que se han podido juntar”.

DATOS IMPORTANTES
Fecha: martes 18 de abril
Hora: de 9 a 21
Lugar: Hotel Conquistador (Suipacha, 948, Buenos Aires)
Inscripción aquí

Nuestro evento en la COP 2

El jueves 20 de abril de 14 a 15.20 seremos parte del evento “Tensiones y riesgos de los defensores y defensoras ambientales en Latinoamérica”. Organiado por Fundación Plurales junto a la Plataforma de Defensores y Defensoras de la Tierra y Territorio frente al Extractivismo, la International Land Coalition (ILC), el Observatorio Ciudadano (Chile), el Centro de Investigación y Educación Popular – CINEP (Colombia), el Comité de Desarrollo Campesino – CODECA (Guatemala), la Asociación Servicios Educativos Rurales -SER (Perú) y la Coalición Nacional por la Tierra Argentina.

Esta actividad, que requiere inscripción previa, tiene el objetivo de visibilizar las tensiones y riesgos de los defensores y defensoras de Latinoamérica y analizar datos cuantitativos actualizados sobre las amenazas y agresiones.

Nicolás concluye que “es muy difícil para la sociedad civil poder participar de estos eventos, y aún más, poder desarrollar eventos en el marco de estas conferencias, espacios internacionales consagrados como amplificadores de mensaje para las organizaciones que logran generar agenda. Por esto, es sumamente importante poder impulsar actividades donde las organizaciones de base que apoyamos puedan incorporarse y compartir sus acciones, demandas y luchas”.

DATOS IMPORTANTES
Fecha: jueves 20 de abril
Hora: de 14 a 15:20
Lugar: Hotel Libertador (Avenida Córdoba 690)
Inscripción aquí

Fundación Plurales en el III Foro Mundial de Derechos Humanos

Este lunes 20 de marzo comienza el FMDH23, que tendrá una duración de 5 días, se dividirá en 26 ejes temáticos y será presencial en Buenos Aires. Allí estaremos presentes para debatir sobre los desafíos de combatir las desigualdades, promoviendo equidad e inclusión social.

Habrá más de 1000 paneles, talleres, presentaciones de libros y actividades culturales. Entre los principales ejes temáticos se destacan: Acceso a la justicia, Ambiente y Desarrollo Sostenible, Derecho a la tierra, Desarrollo social inclusivo y Cohesión social, Mujeres géneros y diversidades, entre otros. Contará con más de 150 conferencistas internacionales como los ex presidentes Pepe Mujica, Evo Morales, José Luis Rodríguez Zapatero, Ernesto Samper y Rafael Correa. También, referentes como el ex juez español Baltasar Garzón; Rita Segato; Shui-Meng; Fabián Salvioli; Luis Moreno Ocampo; Morris Tidball-Binz; Haydeé Oberreuter; Karine Ruel, entre otros.

En relación a nuestra participación, Nicolas Avellaneda, integrante de las áreas de Democratización de Recursos Naturales y Territorios de Conocimiento de la Fundación, explica que “Plurales trabaja siempre desde una perspectiva de acceso a los derechos, entonces esta agenda del Foro Mundial de Derechos Humanos para nosotros es sumamente importante. Trabajamos el tema de acceso al agua desde la perspectiva del acceso al derecho humano al agua, trabajamos el acceso a la tierra desde el acceso a derechos de la tierra y el territorio, trabajamos con Defensores y Defensoras Ambientales desde los derechos de estas personas a defender sus territorios y sus medios de vida”.

Nicolás detalla que “es importante participar de estos espacios, principalmente porque desde Plurales creemos en la generación de espacios de diálogo, de intercambio y la necesidad de construir con otros nuevas alternativas. Hay muchos problemas que necesitamos atender y claramente la solución nunca es desde un solo sector, nunca es lineal. Los problemas son complejos y sistémicos, entonces necesitamos generar las soluciones con diálogo y construcción con otros y otras, organizaciones, universidades, estados, con los distintos actores que tienen algo que aportar a la solución de cada uno de estos problemas”.

El Foro es organizado por el Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos (CIPDH/UNESCO) y el Gobierno nacional, e integran el Comité Organizador Nacional (CON) más de noventa instituciones gubernamentales y de la sociedad civil, y más de 950 organizaciones participan de las 24 Comisiones Temáticas. Tendrá cuatro sedes: el Centro Cultural Kirchner (CCK) -Sarmiento 151-, el Espacio Memoria y Derechos Humanos ex ESMA -Av. del Libertador 8151-, la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo – UBA (Av. Int. Güiraldes 2160) y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) -Av. del Libertador 8250-.

Podés participar de las conferencias, debates y actividades, inscribite aquí. Lo más destacado serán transmitido por el canal de YouTube del FMDH23, con el objetivo de facilitar el acceso a los contenidos desde cualquier lugar del planeta.

Fundación Plurales en el Foro

Específicamente, Fundación Plurales estará presente en dos eventos. Primero, se proyectará la serie microdocumental Guardianas del territorio: Mujeres, tierra y territorios. El miércoles 22 de marzo de 9 a 10:30 estaremos compartiendo los relatos de distintas mujeres que luchan día a día frente al avance extractivista en Argentina. Será en el Espacio Memoria y Derechos Humanos ex ESMA, en Av. del Libertador 8151, puntualmente en el microcine del Espacio Cultural Nuestros Hijos (ECuNHi). Más información sobre esta serie aquí.

También, estaremos participando de la Presentación del informe anual de la Plataforma Regional de Defensores de la Tierra. El mismo miércoles 22/3 de 15 a 16:30, en la EX ESMA, en el Auditorio – IPPDH del Edificio IPPDH, estaremos compartiendo este informe junto al Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS). Participarán Javier Lantauro Medina del Centro de Investigación y Educación Popular (Cinep), Miluska Carhuavilca García de la Plataforma de Defensores y Defensoras de la Tierra y el Territorio frente al Extractivismo, Nicolás Avellaneda de Fundación Plurales y Raquel Reynoso Rosales de la Asociación Servicios Educativos Rurales.

Para concluir, y en relación a la importancia de que se generen estos espacios de intercambio, Nicolás asegura: “En el último tiempo han aumentado las situaciones de violencia y criminalización contra los y las defensoras en toda América Latina, y esa situación pone de relieve que necesitamos trabajar estos temas, visibilizarlos y empezar a generar soluciones a la problemática”.

Organizaciones indígenas y campesinas presentaron demandas al Grupo de Trabajo de Empresas y Derechos Humanos de ONU

Del 16 al 28 de febrero de este año, el Grupo de Trabajo sobre Empresas y Derechos Humanos de Naciones Unidas (ONU) visitó Argentina. En ese marco, organizaciones de base, de la sociedad civil y de defensoras ambientales miembros de la Coalición Nacional por la Tierra – ENI Argentina y del Programa de Defensoras Ambientales, participaron aportando datos sobre empresas que atacan los derechos humanos en nuestro país y principalmente en sus comunidades.

Este Grupo de Trabajo fue creado por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en junio de 2011 y promueve, difunde e implementa los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos. También tiene el mandato de intercambiar y promover buenas prácticas y lecciones aprendidas sobre la implementación de los Principios Rectores, y de evaluar y hacer recomendaciones al respecto. Sus miembros actuales son la presidenta, Pichamon Yeophantong, vicepresidente Damilola Olawuyi y Fernanda Hopenhaym, Sr. Robert McCorquodale y Elżbieta Karska.

En Argentina se realizaron reuniones y finalmente, el martes 28 de febrero por la mañana, una conferencia de prensa, híbrida presencial y virtual, para que todas las partes interesadas puedan escuchar las observaciones preliminares del Grupo de Trabajo.

En un comunicado posterior a la conferencia, dejaron en claro que «las autoridades argentinas deben garantizar la protección de los derechos humanos en todas las actividades empresariales, especialmente en un momento en que éstas se consideran una posible solución a los problemas económicos del país».

«Argentina cuenta con numerosas protecciones constitucionales de derechos humanos, ha ratificado un gran número de convenios internacionales relevantes y, en general, dispone de leyes y reglamentos adecuados. Sin embargo, hemos identificado una brecha significativa en la implementación y cumplimiento de los marcos legales y regulatorios en todos los ámbitos. Argentina necesita abordar urgentemente estos problemas sistémicos», afirmaron.

Durante la visita, las expertas se reunieron para debatir con representantes del gobierno, de la sociedad civil, sindicatos, Pueblos Indígenas y empresas privadas y estatales. Una de las integrantes del Grupo, Fernanda Hopenhaym, se mostró alarmada por «la invisibilidad que sufren las Comunidades y Pueblos Indígenas, históricamente excluidos y discriminados y que sistemáticamente han tenido mayores índices de pobreza y menor acceso a la salud y la educación».

El Grupo de Trabajo visitó Neuquén, Catamarca y Chaco, mantuvo reuniones con actores de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y de Buenos Aires, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Jujuy, La Rioja, Misiones, Río Negro, Salta, San Juan y Tucumán. También recibieron informes escritos de otras provincias.

Desde Fundación Plurales venimos trabajando con las comunidades estas temáticas y en el comunicado el Grupo destaca, entre otras cosas, lo que venimos denunciando. “En el transcurso de su visita, el Grupo de trabajo recibió numerosas denuncias vinculadas al tema ambiental. Se nos ha informado de irregularidades y fallas sistemáticas producidas durante el procedimiento de evaluación de impacto ambiental, cuyos efectos podrían ser irreversibles para el planeta y generar consecuencias negativas sobre los derechos humanos. Se han enfatizado asimismo las preocupaciones en materia de acceso al agua limpia y potable (…) especialmente en aquellas provincias con actividades extractivas y de agronegocios a gran escala (…) la carencia del agua ha sido exacerbada por la utilización de productos químicos que presuntamente están contaminando los cursos de agua locales. Estos problemas ponen aún más de relieve la falta de infraestructura adecuada que garantice a las comunidades remotas el acceso al agua limpia y potable en estas y otras provincias. En efecto, muchas Comunidades Indígenas de distintas provincias del país manifiestan con preocupación que sus territorios están en peligro no solo de ocupación, sino de destrucción de la biodiversidad por amenazas de distintas industrias. El Grupo de trabajo ha podido asimismo observar los efectos de la deforestación y la pérdida de biodiversidad en algunas regiones, y cómo estos afectan de manera desigual a las comunidades en riesgo de vulnerabilidad. Del mismo modo, nos preocupa la información recibida acerca de la presunta falta de protección efectiva y los subsecuentes impactos negativos en áreas protegidas en algunas provincias del país (…) Estas tendencias resultan alarmantes en vista de que problemáticas ambientales como la contaminación del agua, aire y suelos, así como la degradación causada por el desmonte y los monocultivos agrícolas y forestales, exacerban los efectos del cambio climático”.

El informe final de esta visita, que incluirá los distintos hallazgos y recomendaciones finales, será presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas en junio de 2023.

Argentina evaluada en Naciones Unidas: Examen Periódico Universal (EPU)

Desde hoy y hasta el 3 de febrero, tendrá lugar en Ginebra, Suiza, el 42° período de sesiones del Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal (EPU) del Consejo de Derechos Humanos (CDH) de Naciones Unidas (ONU). En este cuarto ciclo 13 Estados parte de la ONU serán revisados por su desempeño en derechos humanos.  

En este caso, Argentina deberá responder sobre los hechos de violencia institucional; la implementación de la interrupción voluntaria y legal del embarazo; las políticas públicas en materia de violencia contra las mujeres y personas LGBTIQ+, la implementación de la Educación Sexual Integral (ESI); los avances en el reconocimiento de los territorios indígenas; la situación de las personas migrantes y refugiadas y la ley de Humedales. 

El EPU es un proceso de examen entre Estados, mediante el cual se revisa el cumplimiento de las obligaciones y compromisos de derechos humanos de los 193 Estados miembros de la ONU cada 4 años y medio. Esta es la cuarta vez que el Estado argentino se somete a este escrutinio, lo hizo en 2008, 2012 y 2017.  

El encargado de llevar adelante el examen es el Grupo de Trabajo del EPU conformado por los 47 miembros del CDH. Durante el examen, el Estado evaluado es asistido por un grupo de tres países que se conocen como “troikas”, facilitadores del proceso. Esta vez, los países sorteados para el examen de Argentina son Bolivia, China y Gabón.

El examen tiene forma de diálogo interactivo y dura 3 horas y media, y podrá verse online

El Estado argentino tendrá tiempo para presentar su informe nacional y responder a comentarios y preguntas de otros países, quienes también formularán recomendaciones. Una vez finalizado el examen, la troika prepara un “informe de resultados” que contiene un resumen del proceso. 

Luego, Argentina tendrá la oportunidad de hacer observaciones preliminares sobre las recomendaciones, “aceptarlas” o “tomar nota” de ellas. Todas ellas se incluirán en un “informe final” que se aprobará por consenso en el Grupo de Trabajo y más adelante, formalmente, en el 53º periodo ordinario de sesiones del CDH que tendrá lugar en Ginebra del 19 de junio al 14 de julio de este año. 

Si bien en esta ocasión no podremos estar presencialmente, entendemos que las recomendaciones del EPU constituyen una gran oportunidad para volver a insistir sobre las deudas pendientes con los derechos humanos. Por eso, en los últimos meses del 2022, con organizaciones de derechos humanos y Gobiernos de Francia, Alemania, Suiza, Países Bajos, Eslovenia, Paraguay, Bolivia y Finlandia realizamos acciones de incidencia. Además nos contactamos con las Coaliciones Nacionales por la Tierra (CNT) de África. 

En todos los casos, para incentivar a estos gobiernos a que incluyan las temáticas de derechos a la tierra en sus preguntas al Estado argentino, les acercamos el informe “DERECHOS HUMANOS Y LA RELEVANCIA DE LOS DERECHOS A LA TIERRA Y TERRITORIO EN ARGENTINA”, realizado por las organizaciones miembro de la Coalición Nacional para la Gobernanza de la Tierra – ENI Argentina, impulsada por la International Land Coalition (ILC) y sus socios en Argentina: Fundapaz, Fundación Plurales, Redes Chaco y la Federación Agraria Argentina. 

Los documentos en los que se basa la Comisión examinadora del EPU para la evaluación son:

-El informe nacional presentado por el Estado bajo examinación. 

-Una compilación de los informes de expertos y grupos de trabajo independientes conocidos como los Procedimientos Especiales, los Órganos de los Tratados de derechos humanos, y otras entidades de las Naciones Unidas.

-Un resumen de la información proporcionada por los actores interesados pertinentes, incluyendo las instituciones nacionales de derechos humanos, las organizaciones regionales y las organizaciones no gubernamentales.

Queremos destacar que al revisar los tres informes ya publicados por ONU, detectamos que logramos incluir cuestiones claves de los derechos a la tierra en la evaluación.

En el informe de compilación de expertos se incorporaron recomendaciones textuales del informe de la CNT Argentina, en el informe de organizaciones regionales tomaron recomendaciones del último informe del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (DESC) realizado por la Coalición y también, en las preguntas claves enviadas con anticipación, Alemania y Eslovenia han apuntado sus preguntas a temas clave introducidos en el informe. 

Del contenido del informe presentado por la ONU, destacamos la preocupación por las denuncias de amenazas y violencia, en los últimos años, contra les defensores de los derechos humanos de los pueblos indígenas, y por la tendencia a la confrontación violenta y criminalización de quienes buscan la restitución de los territorios indígenas. 

El informe retoma que el DESC recomendó garantizar la implementación y reglamentación de la Ley 27118 de Agricultura Familiar, tomar medidas para reforzar la seguridad de la tenencia de la tierra de las comunidades campesinas y los pueblos indígenas. 

La Relatora Especial sobre el derecho a la alimentación, Hilal Elver, expresó su gran preocupación por el agotamiento del suelo y la degradación de las tierras asociados a la producción de soja, y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) clasificó a la Argentina entre los países que habían perdido más bosques. Mientras el Comité DESC se mostró muy alarmado por el aumento en Argentina, del uso de pesticidas y herbicidas que contienen glifosato, y recomendó la adopción de un marco normativo que incluya la aplicación del principio de precaución con respecto al uso de pesticidas y herbicidas nocivos. 

Sobre el derecho a la tierra, Elver indicó que, a lo largo de los años, y como consecuencia de la expansión de las actividades agrícolas, incluida la producción de soja, los pueblos indígenas perdieron grandes porciones de sus territorios tradicionales. Al mismo tiempo, el Comité DESC marcó su preocupación por la falta de mecanismos para la titulación de las tierras ancestralmente ocupadas por los pueblos indígenas. 

Finalmente, el equipo de las Naciones Unidas en el país consideró necesario avanzar en el relevamiento de las tierras comunales indígenas y en la reglamentación de una ley de propiedad comunitaria y una ley de consulta previa promoviendo mecanismos de consulta libre e informada a los pueblos indígenas a nivel nacional y provincial, adecuados a estándares internacionales, focalizando la cooperación en la región del Gran Chaco.

Fundación Plurales seguirá de cerca este Examen Periódico Universal como otra posibilidad de seguir insistiendo en las deudas con las personas que viven en y por la tierra de Argentina. 

Fundación Plurales participó activamente de la CSW66

La Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW), dependiente del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC), es el principal órgano internacional intergubernamental dedicado exclusivamente a la promoción de la igualdad de género. Documenta la realidad que viven las mujeres en todo el mundo y elabora normas internacionales en materia de igualdad de género.

Una vez por año, representantes de los Estados Miembros, entidades de las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales (ONG) acreditadas por el ECOSOC de todas las regiones del mundo se reúnen, durante dos semanas, en la Sede de las Naciones Unidas en Nueva York, para debatir sobre los avances y las brechas en la aplicación de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing de 1995, el principal documento de política mundial sobre igualdad de género; y la 23ª Sesión Especial de la Asamblea General, celebrada en 2000 (Beijing +5), así como sobre las cuestiones emergentes que afectan la igualdad de género. Allí los Estados Miembros acuerdan medidas para acelerar los avances en esta materia en los ámbitos político, económico y social. Las conclusiones convenidas adoptadas por los Estados Miembros constituyen un modelo para que las y los líderes mundiales promuevan la participación y el liderazgo plenos y equitativos de las mujeres y las niñas en el diseño y la ejecución de políticas y programas sobre el cambio climático, el medio ambiente y la reducción del riesgo de desastres. ONU Mujeres apoya todos los rubros de la labor de la Comisión y facilita la participación de representantes de la sociedad civil.

Este año, entre el 14 y el 25 de marzo, se realizó el sexagésimo sexto período de sesiones de la Comisión, y Fundación Plurales participó activamente en diferentes sesiones, para seguir construyendo un camino y una red de mujeres organizadas y potentes.

La segunda reunión intergubernamental más grande de las Naciones Unidas que se celebra en Nueva York, culminó su período de sesiones de dos semanas y reconoció el importante papel que desempeñan las mujeres y las niñas como agentes del cambio para el desarrollo sostenible, en particular, para proteger el medio ambiente y abordar los efectos adversos del cambio climático.

Por primera vez, fue abordada la crisis climática como tema prioritario en esta comisión, y se analizaron y tomaron compromisos en función de abordarla. En el CSW66 se reconoció con preocupación que los efectos del cambio climático, la degradación ambiental y los desastres repercuten de manera desproporcionada en todas las mujeres y las niñas. Estos efectos pueden abarcar la pérdida de hogares y medios de vida, la escasez de agua, la destrucción y los daños causados a las escuelas y las instalaciones sanitarias.

La directora ejecutiva de ONU Mujeres, Sima Bahous, expresó: «Los acuerdos alcanzados por la Comisión llegan en un momento cuando el mundo necesita con urgencia, la creación de soluciones nuevas y coherentes a las crisis interrelacionadas que nos afectan a todos los seres humanos. Ahora no sólo disponemos de un plan trazado con medidas prácticas y específicas encaminadas a fomentar la resiliencia y la recuperación mundial, sino también coincidimos en que las soluciones dependen de darles a las mujeres y las niñas un papel protagonista. Saquemos provecho del trabajo realizado aquí, pongamos en práctica estos acuerdos de inmediato y hagamos avanzar estas decisiones en todos los importantes foros que tenemos por delante, incluida la COP27».

El 15 de marzo Fundación Plurales participó en la sesión “Ampliación de las iniciativas de mujeres y jóvenes para combatir el cambio climático: soluciones y mejores prácticas”, organizada por el Reino de los Países Bajos. Coorganizado por Aurículas, Jonge Klimaatbeweging, WECF, WO=MEN Plataforma Holandesa de Género y Países Bajos Vrouwen Raad (NVR).

En este panel participaron Robbert Dijkgraaf, Ministro de Educación, Cultura y Ciencia (OCW), Países Bajos (TBC); Enaam Ahmed Ali, representante de ONU Mujeres 2022 para los Países Bajos; Lilian Gregorio, Fundación Plurales, una de las ganadoras del Premio Soluciones Climáticas Justas de Género de WECF; la Dra. Kaouthar Darmoni, Directora de Atria, Instituto sobre igualdad de género e historia de la mujer y Esin Erdogan, Jonge Klimaatbeweging (JKB), Movimiento Nacional Juvenil por el Clima.

Algunas de las cuestiones claves abordadas fueron el impacto del cambio climático y las políticas climáticas en la igualdad de género en los Países Bajos, se buscó compartir “historias inspiradoras” de acciones climáticas centradas en la juventud y las mujeres. Se destacó la importancia del apoyo y la colaboración gubernamental y del sector privado para la acción climática y ambiental y el intercambio de conocimientos; experiencias y lecciones aprendidas sobre políticas y acciones climáticas transformadoras de género, entre organizaciones de base, gobiernos e instituciones juveniles y feministas con liderazgo y la inclusión de más jóvenes y mujeres en la primera línea de los efectos del cambio climático.

A su vez, coorganizamos el Panel “La resistencia de las defensoras ambientales en América del Sur y las claves del financiamiento feminista”. Se realizó el 22 de marzo y participaron Silvia de Vecinxs Unidxs por un Ambiente Sano – VUDAS (Argentina), Rosalba de la Asociación Indígena Joguero Aty (Paraguay), Nancy de INMUOR (Bolivia) y Luciana de Antofagasta Resiste (Argentina). Ellas relataron sus experiencias de resistencia y las problemáticas específicas de sus territorios. Luego, tomaron la palabra tres directoras de ONGs y fondos. Lilian Gregorio de Fundación Plurales (Argentina) destacó la importancia de participar en espacios como la CSW, la incidencia social y política y la generación de herramientas para el compromiso de actores clave para ampliar la participación política de defensoras ambientales. Carmen Aliaga del Colectivo CASA (Bolivia) analizó el contexto en el que se desarrollan nuestros programas y Luz Aquilante del Fondo de Mujeres del Sur (Arg, Bol y Py) presentó un mapa de conflictos socio ambientales que enfrentan las defensoras ambientales y la importancia del financiamiento feminista a grupos de defensoras ambientales para seguir apoyando las resistencias e iniciativas.

Consideraciones finales

En el documento final de la CSW66 se exhorta a impulsar y fortalecer la influencia y la participación plenas, igualitarias y significativas de las mujeres y las niñas. Deben emprenderse esfuerzos específicos para amplificar las voces y el conocimiento de las mujeres marginadas, incluidas las mujeres indígenas, mayores de edad, con discapacidades, migrantes y aquellas que viven en zonas rurales, remotas y propensas a los conflictos y desastres. Es fundamental escuchar e incluir sus aportes en la gestión, conservación y uso sostenible de los recursos naturales, así como en los programas e iniciativas de mitigación y adaptación climática.

Las iniciativas para abordar el cambio climático, la degradación ambiental y la reducción del riesgo de desastres deben considerar lo siguiente:

-Promover la participación y el liderazgo plenos y equitativos de las mujeres y las niñas para lograr que la gestión de los recursos naturales y la acción climática, ambiental y de reducción del riesgo de desastres sean más efectivas. Las mujeres y las niñas están adoptando medidas climáticas y ambientales en todos los niveles, pero su voz, representación y participación deben recibir más apoyo, recursos, valor y reconocimiento.

-Aumentar la financiación con perspectiva de género a gran escala para la acción climática y ambiental y llegar a las cooperativas, empresas y organizaciones de mujeres. Tras los compromisos contraídos en virtud del Acuerdo de París y el Pacto Climático de Glasgow sobre mitigación, adaptación y suministro y movilización de fondos, transferencia de tecnología y creación de capacidad, los países desarrollados deben movilizarse y cumplir con la obligación que asumieron con los países en desarrollo y los pequeños Estados insulares en desarrollo. Además, la financiación climática debe ser cada vez más sensible al género para fortalecer las capacidades de las mujeres, la juventud y las comunidades locales y marginadas y sus organizaciones.

-Desarrollar la resiliencia de las mujeres en el contexto de los sistemas agrícolas y alimentarios, la gestión forestal y pesquera y la transición energética sostenible. Los suelos, los bosques, la pesca y los océanos son las principales fuentes de ingresos, medios de vida, protección social y empleo, sobre todo, para las mujeres y niñas que viven en la pobreza. El acceso igualitario y el derecho a los recursos importantes y los bienes productivos, como la tierra, el agua, la tecnología, el asesoramiento técnico y la información, pueden dar lugar a lograr una mayor seguridad alimentaria, a ampliar el uso de las energías renovables y a crear sistemas más justos, resilientes y sostenibles para toda la humanidad.

-Mejorar las estadísticas de género y los datos desagregados por sexo en el nexo entre género y medio ambiente, e impulsar transiciones justas con perspectiva de género. Los datos desagregados y las estadísticas de género sobre el cambio climático, la degradación ambiental y la reducción del riesgo de desastres, en especial con respecto a las diferencias de género en la vulnerabilidad y los enfoques de adaptación, mejorarán la capacidad de las personas encargadas de formular políticas para desarrollar y adoptar programas y políticas eficaces y con base empírica en todos los niveles, y promover las contribuciones específicas de las mujeres y las niñas en los temas relacionados con la conservación ambiental y la mitigación y adaptación al cambio climático.

Lilian Gregorio, que participó de las sesiones, cuenta por qué es fundamental participar de estos espacios. “Participar tanto en el Comité como en la COP (Conferencia de las Partes, Cumbre Anual que realiza la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático), nos hace primero y principal, tener la posibilidad de hacer planteos y posicionar voces de mujeres defensoras ambientales y nuestras, en relación a temas que a veces no son temas que tienen tanta prensa y difusión, y que requieren ser reconocidos. Es importante hacer este aporte, cuestionar al Estado, a los gobiernos, sobre todo en la defensa de los Derechos desde el plano ideológico y poder plantear algunas cuestiones que están fuera de agenda. También, nos articulamos en torno a la presentación de Informes Sombra que después son divulgados en estos espacios. Esos informes, declaraciones y diagnósticos nos dan un proceso organizativo para poder producirlos. Entonces, hay un proceso participativo por el cual producimos información que después son discursos colectivos consensuados que tienen un intercambio de base y que permiten posicionar voces de defensoras ambientales y ONGs que trabajamos en cosas que no son divulgadas desde otros espacios”.

En relación a las mujeres y el cambio climático, Lilian detalla que son centrales “la opinión de las jóvenes y de la academia. Además, estos procesos que requieren la participación de todos y en especial de las mujeres, demandan fondos y apoyos especiales para coberturas, acciones y prácticas”.

Tejiendo redes: Global Alliance for Green and Gender Action (GAGGA)

En contexto de pandemia y aislamiento social, las redes de trabajo se fortalecieron. En medio de la incertidumbre y el desconcierto social, renovamos la apuesta al trabajo en equipo, a construir con otres. En ese marco, desde 2020, comenzamos a realizar una serie de entrevistas para visibilizar los espacios con los que a diario realizamos nuestra labor, sin los que todo esto sería posible.

En este caso, hablamos con Maite Smet, feminista trabajando por la justicia de género, social y ambiental y coordinadora de la Alianza GAGGA, el acrónimo para el nombre en inglés: Global Alliance for Green and Gender Action, que trabaja con Mujeres, niñas, personas trans, intersex y no binarias. Ella trabaja para las tres organizaciones que están liderando esta iniciativa, principalmente el Fondo Centroamericano de Mujeres (FCAM), que es la organización líder de la Alianza, un fondo de mujeres radicado en Centroamérica y que trabaja a nivel regional, en colaboración con Both ENDS, que es una ONG socioambiental y Mama Cash, también un fondo de mujeres, ambas radicadas en Holanda pero que trabajan a nivel global.

Oficialmente, GAGGA inició en 2016 con financiamiento del gobierno holandés, bajo el marco político Dialogue and Dissent. Pero, “honestamente, este trabajo empieza desde antes cuando muchos fondos de mujeres veían la necesidad de poder apoyar a colectivos liderados por mujeres en temas de Justicia ambiental y al mismo tiempo lo mismo con organizaciones, fondos y ONGs ambientales que veían la importancia de priorizar el género y la justicia de género en su trabajo”, cuenta. Entonces, a través del liderazgo de organizaciones aliadas como Prospera (Red Internacional de Fondos de Mujeres) y Global Greengrants Fund (GGF), se armaron espacios colectivos de construcción, como el Summit on Women and Climate 2014 en Bali, que «unió a muchos de estos fondos con defensoras y activistas ambientales y surgieron ideas de colaboración para fortalecer este trabajo en el nexo de los derechos de las mujeres, justicia de género y justicia ambiental. Reconocemos que los movimientos feministas, de mujeres, ambientales y climáticos lideran un trabajo con el mismo fin, aunque por ahí no se reconoce como tal. Estos movimientos trabajan por el cambio estructural, luchando contra las opresiones sistémicas que llevan a muchas de las inequidades dentro de nuestras sociedad, como el patriarcado, el racismo, el capitalismo y el colonialismo».

Maite explica que “surgió la oportunidad de presentar una propuesta al gobierno holandés, con esta intención de fortalecer y unir estos movimientos, pero Mama Cash y Both ENDS ya estaban liderando otras alianzas que iban a ser presentadas y tenían el potencial de poder trabajar con un fondo que está en el sur global para ser la organización líder de la alianza. Por eso pensaron en el FCAM, un fondo de mujeres muy reconocido por su trayecto en apoyar los movimientos de mujeres y feministas en Centroamérica”.

Imagen: RENAMAT (Bolivia)

La Global Alliance for Green and Gender Action “se rige por asegurar el liderazgo y que haya espacio para mujeres, particularmente de movimientos locales u organizaciones comunitarias que están trabajando en temas de Justicia ambiental y climática, que en muchos casos han sido excluidas de procesos de toma de decisiones, en temas de financiamiento y no han sido consideradas como actoras de cambio en estos temas, aunque sabemos que lo son”. GAGGA prioriza el acompañamiento y financiamiento de estos colectivos, y lo hace a través de los fondos de mujeres y socio-ambientales. En este momento son un total de 24 fondos de mujeres y socioambientales, incluyendo al FCAM y Mama Cash como fondos de mujeres. Maite detalla las formas de acompañamiento que hacen con las organizaciones. “Primero dar apoyo directo a grupos y colectivos, a través de sus propios mecanismos de financiamiento y acompañamiento. Es importante destacar que nosotras no exigimos que tengan una manera de hacer las cosas, confiamos mucho en su trabajo, reconociendo que ellas han trabajado por mucho tiempo en sus regiones y contextos y con los movimientos directamente. Adicionalmente también trabajamos con ONGs que proveen un acompañamiento no financiero, como legal, técnico, temático sobre la justicia climática y ambiental. Eso nos permite apoyar a más de 400 organizaciones comunitarias mayoritariamente lideradas por mujeres en América Latina, África y Asia”.

Estos tipos de acompañamiento que realizan, tienen que ver con la vinculación de procesos de incidencia de lo local a lo regional e internacional y viceversa. “Aquí la organización Both ENDS tiene un rol muy muy grande, particularmente en relación al sector privado o el gobierno holandés y sus inversiones y políticas públicas que puedan tener un impacto directo en comunidades que están en el sur global. Obviamente empezamos con Holanda, recibimos el financiamiento de ellos y tenemos ese acceso para hacer esa incidencia, pero también tratamos de incidir en otros espacios, particularmente con donantes, inversores y gobiernos”.


Los tiempos de pandemia

Sobre la crisis sanitaria mundial que vivimos, Maite cuenta que “las organizaciones han seguido haciendo su trabajo, convirtiéndose en más importante aún, y nosotras tratando de buscar las mejores maneras de apoyarlas”. Destaca que como mucho de lo que tenían planificado pasaron a ser virtual, “ahí vemos la resiliencia de los movimientos que se organizan, da lo mismo cómo, pero se organizan. Han hecho mayoritariamente todas las cosas virtuales y cuando hay oportunidad de reunirse lo hacen con todas las medidas sanitarias que se requieren”.

La incidencia resultó más difícil, “porque por la pandemia, los gobiernos restringieron la movilización y participación en espacios de toma decisión, limitando la participación de gente. Adicionalmente, lo que hemos visto más este año, en particular, que los años anteriores, es que mucha gente se ha contagiado, lo que ha afectado también el trabajo, dado que las personas se tenían que cuidar o cuidar a familiares”.

En relación al apoyo particularmente, en el primer año de la pandemia desde GAGGA se lanzó un fondo de autonomía y resiliencia, “dado la pandemia, muchas de los grupos y colectivos que apoyamos se quedaron sin comida, sin agua o sin sustentos económicos. Con un total de €255,000 pudimos apoyar a más de 45 organizaciones en 21 países para que pudieran fortalecer sus sistemas comunitarios de resiliencia. Por ejemplo, comprar insumos para una huerta comunitaria o materiales para un sistema de agua comunitario, siempre liderado por las organizaciones comunitarias”.

Nuestro tejido

Fundación Plurales dentro de GAGGA tiene un rol de ONG. “COmo expliqué, dan un acompañamiento no tanto financiero, más que nada legal o técnico, también en temas de procesos de incidencia crean espacios, ayudan con las demandas, vinculan las organizaciones con otras y colectivos”. Maite explica que ahí “Plurales ha jugado un rol muy importante para apoyar a compañeras y colectivos que están haciendo mucho trabajo alrededor de la justicia climática. Efectivamente, lanzaron la Escuela Feminista para la acción Climática (EFAC), donde se reúnen varias de estas cosas. Las capacitaciones, fortalecimiento de capacidades, pero también apoyar sus demandas, entender que su trabajo es acción climática. Han podido reunir varias organizaciones que son apoyadas por los fondos de GAGGA para ser parte de esta Escuela Feminista”.

La EFAC es una Plataforma Virtual para la formación e intercambio entre grupos de defensoras de derechos humanos y ambientales (GDDHA), y amplificar el poder de las voces de las mujeres en los territorios.

Lo que viene

La coordinadora de GAGGA enumera varios desafíos que se presentan para adelante en pandemia. “Creo que uno de los desafíos más grandes es que hay una necesidad de que sigamos trabajando virtualmente, y particularmente para organizaciones que apoyamos, muchas son de comunidades rurales o indígenas que no tienen acceso a Internet para poder hacer esto, eso es un desafío grande y continuamente vemos qué hay que hacer”. La fortaleza del ecosistema de GAGGA, a través de los fondos y las ONGs, puede dar el apoyo que necesitan para conectarse. Por ejemplo, si una organización quiere participar en un evento internacional o hacer una ponencia, se dan varias herramientas para que accedan a este. “Para que tengan internet le compramos un paquete de datos o las ayudamos para que se vayan al centro más cercano donde hay Internet y de la manera más segura, tratamos de encontrar maneras y usamos nuestra red para asegurar eso”. En esta misma línea, un desafío es no poder reunirnos, “creo que eso nos ha hecho mucha falta como red, como alianza y también en temas de construcción de movimientos. La posibilidad de poder vernos de nuevo cara a cara, organizarnos, planificar acciones conjuntas sería muy potente pero lo vemos lejos”.

Por otro lado, se refiere a la crisis de las tareas de cuidados que desató esta pandemia. “El covid ha afectado directamente la salud de las personas y las organizaciones, o sus familiares o gente en su comunidad, y eso requiere que esa persona no trabajé, se cuide o cuide a otros y el tema del cuidado propio o el colectivo es super importante en la pandemia y muchas veces no se considera. Entonces ahí tratamos de ser lo más flexible posible para que reciban ese apoyo”.

“Lo otro que hemos visto, es que la pandemia ha exacerbado mucho las inequidades que ya existen en nuestra sociedad, a nivel económico, social, político. Entonces, hay que entender que muchas comunidades no solamente están enfrentando la crisis climática, sino una multitud de crisis que requieren mucha flexibilidad en el apoyo que les demos para enfrentarlas y que asegure su bienestar y el bienestar de su colectivo o de su comunidad. Eso también es un desafío, que se entienda que el trabajo que hacen va más allá de la acción climática, que también hay necesidad de salarios buenos, que se puedan cuidar, que tengan tiempo de descanso y eso no se prioriza mucho cuando se trabaja con movimientos».

Finalmente, Maite alerta que los gobiernos están priorizando la reactivación económica, “muchas industrias extractivas han recibido dinero y han podido avanzar con sus actividades como si no hubiera pandemia, eso ha afectado mucho a comunidades directamente y por el encierro no han podido tomar las acciones que podrían si estuviéramos en un momento normal”. Al igual que Zulema Burneo, coordinadora regional para América Latina y el Caribe de la Coalición Internacional para el acceso a la Tierra (ILC), en nuestra anterior entrevista, hace hincapié en los procesos de reactivación económica post pandemia. “Esta prioridad económica de los gobiernos está teniendo un impacto directo en avanzar con industrias extractivas, que al final no ayudan ni a nivel comunitario ni tampoco con la crisis climática a nivel mundial”, cierra.

Foto de portada: WoMin African Alliance

Fundación Plurales cumple 34,4 vueltas al mundo

Desde Fundación Plurales trabajamos hace 20 años para fomentar procesos territoriales y comunitarios, potenciando redes y acciones que promocionan el pleno ejercicio de los derechos económicos, sociales y culturales desde la justicia ambiental y de género.

Iniciamos nuestro recorrido y trabajo territorial en zonas rurales aisladas de Argentina, Bolivia y Paraguay, pertenecientes a la región del Gran Chaco Americano. Actualmente, seguimos focalizando nuestras acciones en este territorio, pero articulamos y ejecutamos programas en toda América Latina, potenciando puentes y cooperación sur-sur entre la región Chaqueña; Andina; Amazónica y Centroamericana.

En este tiempo compartido, hemos recorrido tantos kilómetros, que dimos más de 34 vueltas al mundo, con la clara convicción de activar redes y movimientos que impulsen vínculos justos en términos ambientales y de género en cada territorio, conocimientos socialmente útiles e incidencia para el acceso a derechos. Acompañamos y nos involucramos en procesos y resistencias que permitan que “muchos mundos, quepan en el mundo”.

En números

– Más de 45 proyectos.
– 4 Programas (Programa SEDCERO; Fortaleciendo a Defensoras Ambientales; Acción Climática Participativa y Escuela Feminista para la Acción Climática)
– Impulso de 6 redes regionales y una plataforma global. (Red TISA; Colectivo de Mujeres del Chaco Americano; Red de Pequeños y Medianos Productores del Chaco; ENI Argentina; Iniciativa Tierra en los ODS-LAC y Plataforma Global Feminista por la Tierra)
– Acciones directas en 12 países (Argentina, Bolivia, Paraguay, Ecuador, Brasil, Venezuela, Perú, Colombia, Guatemala, Nicaragua, Honduras, México)
– 6 Informes presentados a Naciones Unidas
– 22 recomendaciones de Naciones Unidas a Estados aportadas desde los informes presentados
– Apoyamos a más de 55 grupos de mujeres
– 49 comunidades locales, campesinas e indígenas con las que trabajamos codo a codo
– Más de 1.374.560 Kilómetros recorridos, lo que representa 34.4 vueltas al mundo
– 35.200 personas beneficiarias en el marco de los diferentes proyectos
– 620 obras de acceso a agua segura en Argentina y Paraguay
– Más de 277.760.000 litros de agua cosechados
– Millones de mates e historias compartidas

Gracias a les que nos acompañan hace más de una década.

Las resistencias no saben de cuarentena: CONTIOCAP

Mientras todes miramos las cifras de muertes y contagiades, atentes a cuáles van a ser las próximas medidas de los gobiernos, los conflictos socioambientales siguen y en muchos casos, se profundizan.

El abandono estatal y la falta de acceso a lo básico no es novedad y en estos contextos queda en evidencia más que nunca; la contaminación y la destrucción de nuestros bienes naturales no se detiene.

En esta ocasión, dialogamos con la Coordinadora Nacional de Defensa de Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas (CONTIOCAP).

Para que la pandemia no nos tape el bosque, dialogamos con Ruth Alipaz Cuqui, originaria del Pueblo Indígena San José de Uchupiamonas de la Amazonia Boliviana, miembro de la Mancomunidad de Comunidades Indígenas de los Ríos Beni, Tuichi y Quiquibey y coordinadora general de CONTIOCAP, que desde hace años vienen resistiendo y cuidando la vida en Bolivia.

― ¿Cuándo y cómo nació CONTIOCAP?

La CONTIOCAP nació el 2 de diciembre de 2018, en un primer congreso de las distintas resistencias contra la destrucción de nuestros territorios que existían a nivel nacional en Bolivia, que fue convocado por los defensores y defensoras de la Reserva de Flora y Fauna Tariquia.

La convocatoria fue para las resistencias, quienes ante la destrucción y cooptación de las organizaciones tradicionales de representación de nuestros pueblos, luchábamos desde las bases en nuestros respectivos territorios indígenas y/o áreas protegidas, defendiéndonos de los planes del gobierno de imponer el extractivismo: como las exploraciones petroleras, minería a cielo abierto en tierras altas y bajas, construcción de mega hidroeléctricas en las principales cuencas de Bolivia, ampliación de la deforestación para el agronegocio y agrocombustibles, mercantilización de nuestros territorios y áreas protegidas por intereses políticos, etc.

En este primer congreso determinamos como pueblos indígenas, originarios campesinos, algunas con organizaciones orgánicas y otras de base, defensores/as indígenas independientes, etc, crear la Coordinadora Nacional de Defensa de Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas en Bolivia, para que en unidad nos defendamos de todo tipo de atropellos sistemáticos desde el gobierno central, de empresas transnacionales y nacionales, de organizaciones y grupos afines al gobierno, etc. Los fundadores fuimos 12 resistencias, y durante el segundo Congreso en 2019 se han sumado más, en 2020 también se fueron sumando, siendo a la fecha 35 resistencias a nivel nacional.

Antes de la creación de la CONTIOCAP, cada resistencia se defendía sola y como podía en su territorio. El nacimiento de esta Coordinadora fue para apoyarnos mutuamente entre resistencias, sea con presencia en momentos de los ataques a nuestros territorios, o, aunque dándonos apoyo moral; denunciar públicamente ante la población civil boliviana, y nivel internacional, ante organismos de Derechos Humanos nacionales e internacionales, regionales y universales sobre las violaciones a los derechos indígenas, derechos de la naturaleza y derechos humanos, con el fin de generar debate sobre la política económica basado en el extractivismo; promover la formación para nuestras defensoras y defensores, y para nuestras comunidades, en temas geopolíticos para entender la procedencia de las violaciones de nuestros derechos como pueblos y naciones indígenas, las violaciones a los derechos humanos, y la destrucción del medio ambiente, así fortalecer a las defensoras y defensores par las luchas con conocimiento; y de ser posible, proponer alternativas o cambios de actitud de la forma de economía basado en el extractivismo, que no puede llamarse desarrollo a algo que mata, como primer paso para reducir la destrucción de nuestras fuentes de agua, de los bosques.

― ¿Qué tareas realizan?

La CONTIOCAP en su mayoría está liderada por mujeres, incluso desde las resistencias mismas, y está organizada en coordinaciones regionales: Chaco, Amazonía, Valles y Altiplano, y una coordinación general. Realizan tareas como:

  • Visitar las comunidades que están siendo atropelladas, avasalladas, o violentadas por agentes del gobierno, fuerzas públicas, empresas transnacionales, y poderes económicos nacionales, para apoyar, recoger información, u organizar visitas de intercambio de experiencias.
  • Trasladarse a sitios donde ocurren los siniestros como incendios forestales provocados por grupos afines privilegiados con dotación de tierras y protegidos por el gobierno, para recoger evidencia de la situación, documentarlas y a veces denunciarlas desde el sitio mismo si hay posibilidad de acceso a comunicación.
  • Enviar información sobre las violaciones de derechos en los territorios y áreas protegidas, para realizar denuncias a nivel nacional ante los medios de comunicación y ante la opinión pública, o ante organismos internacionales regionales y universales.
  • Organizar o realizar talleres de formación para las comunidades locales, defensores y defensoras en temas de derechos indígenas, derechos humanos, medioambientales, planes geopolíticos, políticas económicas basadas en el extractivismo, que dan origen o están estrechamente vinculados a la violación de derechos humanos, derechos indígenas y de la Madre Tierra.
  • Gestionar apoyos para pequeños proyectos productivos o de fortalecimiento, o de apoyo a las acciones de defensa en las comunidades.
  • Apoyar a las comunidades con promoción de sus artesanías o productos para la venta en centros urbanos, o colaborar con el envío de estos productos pedidos desde las ciudades.

Sin algunas de las tareas diarias, pero hay mucho más en el día a día.

― ¿Cómo ha sido este tiempo en pandemia en relación a la lucha que llevan adelante?

En primera instancia nos hemos aislado en nuestros territorios, muchas veces sin acceso a comunicación por falta de infraestructura de internet en nuestras comunidades. Luego fuimos observando cómo las actividades extractivas se iban intensificando en nuestros territorios aprovechando la pandemia, y en nuestras comunidades se profundizaban las necesidades básicas de productos de primera necesidad, o cuando el gobierno determinó ayudas sociales nuestros pueblos quedaron excluidos por diferentes razones: no había transporte desde nuestras comunidades y los privados cobraban precios altos, y para nuestras comunidades alejadas era difícil llegar a los centros donde habían bancos para cobrar las ayudas del gobierno, los tiempos de salida y retorno en los puestos de controles que se habían multiplicado en las carreteras o ríos, no entendían que el tiempo no era suficiente para hacer extensas filas en los bancos o tiendas de aprovisionamiento para volver hasta el mediodía. Hubo mucha discriminación y mal trato en los controles con autoridades locales, militares y policías que te controlaban y te trataban como si estuvieras ingresando a otro país, o como si fueras un delincuente (la gente perdió toda humanidad y respeto hacia los civiles y entre civiles). Vimos que no había atención o provisión de insumos de bioseguridad ni medicamentos desde el gobierno central, departamental o municipal, nuestras familias empezaron a entrar en crisis por no poder generar recursos económicos, las defensoras que ya tenemos economías precarias (porque defender derechos no te da de comer), y en muchos casos dependemos de la ayuda de nuestras familias que nos sostienen, la pasamos muy mal.

Toda esta situación nos obligó a salir de nuestros territorios para denunciar lo que pasaba en nuestros territorios con la incursión de empresas petroleras, mineras, cazadores, taladores ilegales de árboles, que llevaban gente foránea a nuestras comunidades sin tomar ninguna medida de prevención. Denunciar falta de atención y hasta discriminación por parte de todos los niveles de gobierno en ayudas sociales, la falta de atención médica, exigíamos se hagan brigadas móviles para que lleguen 2 personas autorizadas a nuestras comunidades para evitar salir en masa a centros urbanos donde podíamos contagiarnos, la comunicación se encareció porque todo era por zoom, y para comprar megas no teníamos recursos.

El gobierno transitorio aprovechó para sacar nuevos decretos, como la abreviación de la autorización de uso de transgénicos. Ministros que aprovecharon para repartirse grandes extensiones de tierras en nuestros territorios, incendiaron el bosque del Chaco. Todo esto lo denunciamos saliendo de nuestros territorios. Además de gestionar algunos apoyos para las defensoras para que se puedan movilizar en sus territorios o a centros urbanos como fue el apoyo logrado de Fundación Plurales.

Nos ha limitado bastante la movilización para cumplir con nuestra labor y objetivos de apoyo, o dar formación, o llegar a los sitios para recoger información, etc. Pero nos hemos dado modos a través de la tecnología para denunciar con nuestros pronunciamientos, o participar en webinars.

― ¿Qué formas se han dado para seguir visibilizando la resistencia ahora que la calle no es una posibilidad o es mucho más complejo ocuparla?

La tecnología sin duda ha sido la mejor aliada, los webinars, los medios de comunicación especializados, o periodistas independientes que nos daban cobertura para denunciar estas situaciones como Mongabay, SERVINDI, ANF que amplificaban nuestros pronunciamientos, nuestras redes sociales, los paneles virtuales, talleres virtuales. Sin duda esto ha supuesto depender de estar siempre conectado a buen internet, lo que implicaba viajar a centros donde hay porque en nuestras comunidades este servicio es inexistente, lo cual tiene un costo, así como comprar el internet en sí.

La movilización en redes activando las alianzas o redes de defensa que tenemos es clave, así mismo ir mejorando nuestra forma de comunicación con conocimiento. Es decir, la pandemia también ha servido para prepararnos mejor con conocimiento, porque en esta lucha el conocimiento es clave para romper ciertos paradigmas de lucha también y adaptarnos a lo que requiere la situación y los tiempos.

― ¿El contexto de pandemia, aprovechando que todos miran para otro lado, posibilitó que los empresarios o gobiernos avanzaran contra ustedes?

Esto lo describí en una pregunta anterior, pero puedo enfatizar que el gobierno y empresas han arremetido con mayor brutalidad e impunidad, incluso procesando judicialmente a defensoras de las comunidades, y ocasionando muertes de defensoras o familiares de defensoras que es imposible de probar que están vinculadas a estas empresas por las acciones de defensa que asumimos.

Por otro lado, hemos anticipado y advertido insistentemente a la población, ante la opinión pública, y ante organismos regionales de Derechos Humanos como la CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos), sobre el hecho de que la pandemia se convertía en la excusa perfecta para justificar mayores amenazas a nuestros territorios indígenas y áreas protegidas, como justificativo para la reactivación económica. Esto está ocurriendo ahora, agudizado por el retorno del gobierno del MAS, que ha comprometido tierras a sus grupos afines transando votos para las elecciones 2020. Y hoy vemos día a día los avasallamientos en nuestros territorios, la desinstitucionalización de la institución que protege las Áreas Protegidas, el SERNANP (Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado), para quitarles en última instancia la categoría de protegidas, para entregarlas como tierras a sus grupos afines que tiene como propósito geopolítico electoral, y hacer desaparecer a los pueblos indígenas que ancestralmente hemos existido y por eso resistimos a sus políticas.